Para un ajuste óptimo de una lentilla, hay que tener en cuenta varios factores importantes. Uno de ellos es el llamado valor DIA. El valor DIA indica el diámetro de una lentilla en milímetros. A continuación, explicamos de qué depende el valor DIA, cómo se determina y por qué es tan importante para un resultado visual óptimo.
El tamaño de lentilla perfecta depende en primer lugar del tamaño de nuestra córnea. El valor DIA también varía según elijamos lentillas blandas o duras. Así, el valor DIA de unas lentillas duras es generalmente menor en comparación con el unas lentillas blandas. Mientras que las lentillas blandas tienen un tamaño medio de 12 a 16 mm y el borde de la lentilla se encuentra parcialmente debajo del párpado cuando los ojos están abiertos, el diámetro de las lentillas duras suele variar entre 8 y 10 mm y, por lo tanto, es un poco más pequeño que el diámetro de la córnea.
El valor DIA lo determina el óptico durante la adaptación de las lentillas. Para ello, hallará los parámetros corneales apropiados para ti y te aconsejará qué lentillas son las adecuadas para tu estilo de vida y tus hábitos visuales. Dado que los distintos parámetros de una lentilla (como su diámetro, curva base o la composición del material) influyen decisivamente en la comodidad de uso y en la biocompatibilidad de unas lentillas, es importante que siempre compres sólo la lentillas prescritas por el profesional que haya realizado la adaptación. Cada fabricante de lentillas puede emplear materiales diferentes en el proceso de fabricación, y las lentillas de diferentes fabricantes también pueden variar en su forma y geometría.
Un valor DIA preciso es crucial para que las lentillas sean cómodas de usar. Sólo podrás disfrutar del mayor confort de uso sin ningún tipo de molestia si tus lentillas tienen el diámetro correcto. Incluso una desviación pequeña de sólo 0,1 ó 0,2 mm puede perjudicar la comodidad de uso, así como el efecto correctivo y por tanto la efectividad de la lentilla.