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Cómo ponerse y quitarse las lentillas: la guía definitiva

Al principio, colocarse una lentilla correctamente en el ojo puede suponer todo un reto para los usuarios noveles. Pero en realidad, como tantas otras cosas, es simplemente una cuestión de práctica Con un poco de paciencia y nuestras recomendaciones, paso a paso te convertirás en todo un experto en la manipulación de lentillas.

En este artículo te explicamos paso a paso cómo ponerte y quitarte las lentillas correctamente y sin complicaciones. Dademás, te proporcionamos consejos útiles sobre el manejo de las lentillas, incluso con uñas largas, y finalmente aclararemos todas las preguntas frecuentes sobre este tema.

Preparativos e higiene

Para manipular tus lentillas siempre deberás tener los dedos limpios. Antes de empezar, lávate las manos escrupulosamente y sécatelas con una toalla que no suelte pelusas. Antes de colocar las lentillas en los ojos, conviene enjuagarlas de nuevo con una solución salina. ¡No emplees agua para aclarar tus lentillas! Saca la lentilla de su envoltorio (blíster) con la yema de un dedo (si se trata de lentillas diarias / lentillas mensuales o semanales.

Si no tienes la misma graduación para ambos ojos, fíjate que usas la lentilla correcta para cada ojo. Para evitar descuidos, conviene empezar siempre con el mismo ojo. Te recomendamos que te coloques frente a un espejo para ponerte las lentillas.

Primera parte: Cómo ponerse las lentillas correctamente

Comprobar que la lentilla esté en la posición correcta

Coloca la lentilla en la yema de tu dedo índice y comprueba que su borde no esté doblado. Puedes hallar la posición correcta doblando la lentilla suavemente entre el dedo índice y el pulgar.

Posición correcta: La lentilla es cóncava, es decir, tiene la forma de un cuenco hueco. Sus bordes están curvados hacia arriba. Si sujetas la lentilla entre tu dedo índice y tu pulgar, la superficie de contacto de la lentilla con el dedo es mínima y sus bordes convergen.

Posición incorrecta: Si la lentilla se amolda y adhiere a la yema del dedo adoptando una forma convexa, está al revés.Simplemente tendrás que darle la vuelta cuidadosamente. El borde de la lentilla del revés puede compararse al de un plato sopero.

Paso 2: Aumentar la superficie de contacto

Lávate las manos con esmero y coloca la lentilla en la yema de tu dedo índice. Usa el dedo índice de la mano derecha para tu ojo derecho y el de la mano izquierda para el izquierdo. Tu dedo debería estar seco y la lentilla, húmeda. Tira suavemente de tu párpado superior izquierdo hacia arriba, usando el dedo corazón de tu mano izquierda. El dedo corazón de la mano derecha tirará suavemente del párpado inferior hacia abajo.

Paso 3: Colocar la lentilla en el ojo

Comienza con el ojo derecho: guía la lentilla lentamente a tu ojo, hasta que entre en contacto con él y se adapte a la forma de la córnea.

Mira en varias direcciones con el ojo abierto, para ayudar a la lentilla a encontrar su sitio. Intenta no parpadear mientras te pones la lentilla. Después, suéltate los párpados y parpadea con cuidado. Si la lentilla todavía no se quedara en su sitio, puedes eliminar posibles burbujas de aire masajeándola suavemente a través de los párpados cerrados.

¿La lentilla está bien colocada?

Después de ponerte la lentilla, ya no deberías notarla en el ojo. Si después de unos segundos todavía tienes la sensación de tener un cuerpo extraño en el ojo, deberías retirar la lentilla con cuidado y comprobar de nuevo si no la habías colocado al revés. En ese caso, simplemente tendrás que darle la vuelta.

También puede ser que una pestaña o un pelito se haya adherido a la lentilla. En ambos casos, habrá que limpiar la lentilla nuevamente antes de volver a colocarla sobre el ojo. A veces puede ocurrir que encuentres pequeños defectos en la lentilla, tales como pliegues o fisuras. En ese caso, no sigas usando la lentilla, ya que estas deformaciones pueden causar daños en el ojo. Será mejor que la deseches y uses una nueva.

Segunda parte: Quitarse las lentillas correctamente

Más de lo mismo: lávate bien las manos antes de tocarte los ojos. En el mejor de los casos, para quitarte las lentillas seguirás el mismo orden que cuando te las pusiste, de modo que no acabes confundiéndolas.

Y otro consejo más: Quítate las lentillas antes de desmaquillarte.

Paso 1: De frente

Dirige tu cabeza hacia delante y mira al espejo. Tira de tu párpado hacia abajo usando el dedo corazón derecho (si empiezas por el ojo derecho; de lo contrario, usa el dedo corazón de la mano izquierda). Sujétate el párpado superior con el dedo corazón de la otra mano.

Paso 2: Retirar la lentilla

Junta un poco los bordes de la lentilla haciendo un movimiento de pinza con las yemas del dedo índice y el pulgar. De este modo, pasará un poco de aire entre el ojo y la lentilla, de modo que se desprenderá fácilmente.

Segunda opción: Mira hacia arriba y empuja la lentilla con el dedo índice hacia la parte inferior (blanca) del ojo. Pellizca los bordes de la lentilla con el pulgar y el dedo índice y júntalos con cuidado. Así se desprenderá del ojo y la podrás retirar sin dificultad.

Tercera parte: El manejo de las lentillas con uñas largas

Si tienes las uñas muy largas, puede resultar problemático sacar las lentillas de su estuche, ya que las lentillas y los cantos duros no se llevan demasiado bien. Para evitar la aparición de rayaduras en la superficie de las lentillas, habrá que manipularlas con las yemas de los dedos. Las personas que llevan tiempo usando largas uñas postizas y se hayan acostumbrado a ellas, con un poco de práctica alcanzarán la suficiente destreza como para manejar las lentillas aún con uñas largas. Los usuarios primerizos lo tendrán más difícil, ya que la sensibilidad de los dedos no es la misma con uñas postizas que sin ellas. Por tanto, unas uñas largas solamente son un impedimento para manejar lentillas si todavía no nos hemos acostumbrado a ellas o si tenemos dificultades en la motricidad fina. Al fin y al cabo, la práctica hace al maestro.

No obstante, hay una técnica especial para poder manipular lentillas con uñas largas. Para ello, hay que sujetarse los párpados con una mano para mantener el ojo abierto mientras el dedo índice y el pulgar de la otra mano formarán una V haciendo la conocida seña de la victoria. Habrá que mirarse a la palma de la mano y mientras tanto juntar los dos dedos presionando suavemente los bordes de la lentilla con las yemas, y finalmente retirarla del ojo. Este método es el que suelen recomendar los oculistas.

Si tuvieras dificultades para manejar las lentillas con tus uñas, puedes preguntar a tu óptico si puede facilitarte un aparato que te ayude a ponértelas y a quitártelas.

Lentillas y maquillaje

Al emplear productos cosméticos en combinación con lentillas, es recomendable tener en cuenta algunos consejos. Si quieres maquillarte, no deberías hacerlo antes de ponerte las lentillas. Ten cuidado a la hora de aplicarte el maquillaje, para no ejercer una presión excesiva sobre los párpados. Los productos en polvo deberían aplicarse siempre con los ojos cerrados para que no perjudiquen el confort de las lentillas. Suele ser preferible usar sombra de ojos a base de crema, ya que no produce polvo y por tanto habrá menos partículas que puedan incidir en el ojo. Lo ideal sería comprar productos cosméticos vegetales, sin aceite y aptos para pieles sensibles. Deberían ser hidrosolubles, para no dejar una película de grasa en los ojos y las lentillas. Este consejo también vale para el rímel. Es mejor no aplicar delineador en la zona interior de los párpados. Antes de desmaquillarte por la noche, siempre deberías quitarte las lentillas. Ten a mano una solución de peróxido de hidrógeno para una limpieza intensiva de restos de maquillaje.

Aparte de lo que te hemos comentado sobre productos cosméticos para la cara, hay algunos otros trucos: será mejor aplicar desodorante, fijador para el pelo o perfumes antes de ponerse las lentillas. Si ya te las hubieras puesto, acuérdate de cerrar los ojos antes de accionar el aerosol, y de mantenerlos cerrados unos segundos para evitar que se deposite sobre las lentillas.

Preguntas frecuentes

¿Qué hago si tengo la visión borrosa?

Comprueba que la lentilla esté en la posición correcta y no al revés. Sácala del ojo con cuidado.

¿Qué hago si la lentilla me incomoda?

Comprueba si hay alguna impureza que se haya adherido a la lentilla. Si te causa una sensación intensa de rozamiento, retírala del ojo, limpia y desinféctala bien y vuelve a ponértela.

¿Qué hago si me pica el ojo después de ponerme una lentilla?

Es posible que, a pesar de haberte lavado las manos y de seguir una rutina de limpieza, todavía queden impurezas residuales. Lávate las manos de nuevo, sácate la lentilla, límpiala bien y vuelve a colocarla en el ojo. No te olvides de comprobar si la lentilla tiene algún defecto de cualquier tipo.

¿Qué hago si la lentilla está dañada?

Desecha la lentilla y usa una nueva.

¿Qué hago si no remiten las molestias?

En el caso de molestias permanentes o frecuentes, o de un enrojecimiento duradero del ojo, deberías quitarte la lentilla enseguida y consultar a un óptico para que te asesore.

Consejo de nuestros ópticos: Acude a una óptica y solicita que te asesoren para adaptarte unas lentillas. Solamente así conseguirás las lentillas adecuadas y podrás evitar que surjan molestias.

¿Es posible que la lentilla se deslice detrás del ojo?

No, es imposible que la lentilla desaparezca detrás del ojo. Puede descolocarse un poco o moverse de su sitio, pero no te preocupes. Lávate las manos y sécatelas. Busca la lentilla palpándote el párpado cerrado, mira hacia el lado contrario y muévela a su sitio masajeándola suavemente.