«Sólo voy a cerrar los ojos un momentito...» es una frase que suele preceder a una siesta de las buenas. Seguramente, esta situación le resultará muy familiar a muchos usuarios de lentillas. Normalmente no supone ningún problema echarse una cabezadita (eso sí, corta) con las lentillas puestas, siempre y cuando no se convierta en una práctica habitual. Aún así, incluso después de una pequeña siesta es posible observar por qué no es la mejor de las ideas: los ojos estarán secos, en el peor de los casos se habrán enrojecido e incluso es posible que las lentillas se hayan adherido a los ojos. En este caso, puede ser bastante difícil quitárselas. Pueden llegar a producirse irritaciones e infecciones.
Tus ojos necesitan una pausa para recuperarse de las lentillas. La córnea no se abastece de oxígeno a través de vasos sanguíneos, sino a través del parpadeo, que provee a la película lagrimal y a los ojos del oxígeno necesario. Al dormir con las lentillas puestas, los ojos están doblemente cubiertos: por las lentillas y por los párpados. Además, a lo largo del día se genera lo que se denomina un biofilm sobre las lentillas, una mezcla de residuos orgánicos de la película lagrimal. El biofilm es un caldo de cultivo ideal para bacterias y gérmenes, por lo que siempre deberías respetar el tiempo de uso indicado de las lentillas y limpiarlas regularmente.
Al contrario que otras lentillas, puedes llevar las lentillas de día y noche de forma ininterrumpida hasta 30 días seguidos (lentillas mensuales Day & Night). Constan de un hidrogel de silicona altamente permeable, que transmite muchísimo más oxígeno a los ojos que las lentillas convencionales. La estructura de las lentillas incorpora poros con agua que facilitan el paso del oxígeno a la córnea. Gracias a su reducido contenido de agua, retienen la humedad y evitan que el ojo se seque, manteniendo intacta la película lagrimal natural.
Particularidades de lentillas de día y noche
✓ Altísima permeabilidad al oxígeno
✓ Depósito de humedad integrado
✓ Material innovador
Ver lentillas de día y nocheUnas lentillas convencionales pueden llevarse, como mucho, durante unas 10 a 14 horas. Las lentillas de día y noche permiten un tiempo de uso varias veces superior, por lo que pueden llevarse sin interrupciones. La mayoría de lentillas de día y noche se comercializan como semanales o mensuales, que pueden llevarse hasta 30 días seguidos.
Además, estas lentillas destacan por su reducido contenido de agua, por lo que conservan mejor la humedad y evitan la sequedad de forma muy efectiva. Todo ello, sin alterar la película lagrimal del ojo y su equilibrio nutritivo.Otra gran ventaja es que las lentillas de día y noche no requieren la limpieza diaria obligatoria para otros tipos de lentillas.
Aún así, si tienes la posibilidad, resulta aconsejable limpiarlas regularmente para evitar una posible irritación de los ojos. Una vez transcurrido su periodo de uso, simplemente tendrás que quitártelas y reemplazarlas por un par nuevo. Así te ahorras el tiempo de andar poniendo y quitándotelas cada día. Este tipo de lentillas es apropiado incluso para personas que tienen alergia a los líquidos de cuidado para lentillas. También resultan idóneas para viajes a países con condiciones de higiene deficientes, al igual que para trabajar en turnos rotativos o de guardia.
En principio, no hay limitaciones para el uso de lentillas de día y noche. Aún así, también en este caso es importante que consultes a tu oftalmólogo o a tu óptico y que te examinen los ojos antes de empezar a llevarlas. Una condición indispensable es que haya suficiente líquido lagrimal. Si tienes ojos secos o muy sensibles deberías evitar el uso continuado de lentillas.
Obligatorio: un asesoramiento óptico profesional. Antes de decidirte a llevar lentillas de larga duración, es necesario que un oftalmólogo o un óptico examine tus ojos.
Un profesional podrá determinar si tus ojos toleran el uso de lentillas de día y noche. Una de las condiciones indispensables para llevar lentillas durante un tiempo tan prolongado es que los ojos dispongan de suficiente líquido lagrimal. Si sufres de ojos muy secos y sensibles, a ser posible será mejor que optes por otro tipo de lentillas.
Al llevar lentillas de forma continuada y prolongada, el riesgo de infección aumenta considerablemente. Por eso, es muy importante acudir regularmente al oftalmólogo o a la óptica para hacerse una revisión. Si notaras algún cambio en tus ojos (enrojecimiento, picor, la sensación de tener un cuerpo extraño en el ojo), quítate las lentillas inmediatamente y contacta a tu óptico u oculista. Las personas con ojos secos no deberían llevar lentillas durante un tiempo prolongado.
Generell wird das Schlafen mit Kontaktlinsen nicht empfohlen. Es gibt jedoch spezielle Kontaktlinsen für längeres Tragen, deren maximale Tragedauer du mit deinem Augenarzt oder Augenoptiker besprechen solltest.
Gelegentliches Schlafen über Nacht mit Kontaktlinsen kann passieren, sollte aber vermieden werden, da es das Risiko von Augenreizungen und Infektionen erhöht.
Kurzes Schlafen mit Kontaktlinsen, wie ein Nickerchen von einer Stunde, ist weniger riskant als über Nacht, sollte aber dennoch vermieden werden.
Einschlafen mit Kontaktlinsen kann zu trockenen Augen, Reizungen und in schweren Fällen zu Infektionen oder Hornhautschäden führen.
Solltest du mit Kontaktlinsen geschlafen haben, dann stelle im Anschluss sicher, dass deine Augengesundheit nicht in Gefahr ist. Entferne gegebenenfalls die Linsen vom Auge, reinige sie und gönne deinen Augen eine kleine Pause vom Kontaktlinsen tragen.